Zapatos con sello propio
“Somos amigas con profesiones completamente distintas, pero con una afición similar: sacar un negocio adelante, respetando el tiempo que le pertenece a nuestra familia”, menciona la quiteña Anabel Pérez de López, quien junto a dos guayaquileñas, Verónica Salem de Massuh y Carla Macchiavello de Fernández, formaron una íntima sociedad para crear ‘El zoco de Cumbayá’, una feria que se viene realizando desde el año pasado con la finalidad de que nuevos empresarios den a conocer sus productos al mercado.
“En víspera de Navidad, quería realizar un bazar y le pedí ayuda a Verónica, con quien tenía una amistad desde hace algún tiempo; ella a su vez buscó a Carla para juntarnos y poner la iniciativa en marcha. En septiembre del 2011 surgió la idea y las cosas se fueron dando de manera improvisada. Al principio, buscamos a quienes podrían participar en la feria, moviéndonos entre nuestras amistades y gente de la comunidad de Cumbayá. Gracias a Dios, recibimos un apoyo enorme. Como no teníamos un lugar seguro y cómodo dónde llevar a cabo el zoco, se nos ocurrió hacerlo en el parqueadero de la iglesia de esta localidad, otorgando un porcentaje de las ventas al padre Emilio, sacerdote de la parroquia, para que él pueda efectuar una ayuda benéfica con los más necesitados, y gustoso aceptó”, agrega Anabel Pérez y afirma que para el bazar de este diciembre se han propuesto aumentar el monto económico que donan a la iglesia.
Made in Ecuador
Anabel y Verónica, de 32 años de edad; y Carla, de 38, querían presentar en su feria algo que no se haya exhibido. “La propuesta inicial fue importar unas alpargatas de Argentina, pero como el trámite era complicado, se nos ocurrió confeccionarlas aquí, para dar la oportunidad de ofrecer distintos materiales y texturas, aprovechando las telas que hay en el país y la mano de obra de nuestros artesanos. Fue así como después de mil y una aventuras en viajes por la sierra, en busca de quien nos podría confeccionar los zapatos, conseguimos a la persona indicada y, actualmente, trabajamos en el taller junto a un equipo de 8 operarios”, manifiesta Carla Macchiavello.
A propósito del nombre de su bazar, los novedosos zapatos fueron bautizados como ‘zocos’ y se estrenaron en la feria del día de la madre. “Guiándonos con el modelo de los Toms, del primer zoco al actual se nota una evolución gigante, ya que buscamos ir acorde con la tendencia de moda. Nos caracterizamos por presentar nuevos diseños y fusiones. Los materiales con los que trabajamos son cuero, cuero gamuzado, velour, gamuza, terciopelo, lona, seda y un sinnúmero de variedades más. Además, la alpargata cuenta con una plantilla suave, cómoda y porosa para que el pie respire. Lo práctico de este accesorio es que combina con cualquier look. Se puede usar con short, jean, vestido, falda, pantalón, leggins; en la playa o en la ciudad”, afirma Verónica Salem y revela que se han encargado no solo de cuidar el diseño, sino también la calidad. “Como hacemos el zapato de principio a fin, nos retroalimentamos de las sugerencias de nuestras clientas y tratamos de complacer sus gustos para ofrecer un producto garantizado”.
Los zoco son una cómoda alpargata que fusiona originales diseños, texturas y materiales hechos en el Ecuador.
Arriba: Carla Macchiavello de Fernández y Verónica Salem de Massuh. Abajo: Anabel Pérez de López.
El éxito: su unión
El sello personal de estas emprendedoras es que ellas se encargan de escoger las telas, realizar los diseños y verificar que los zocos se confeccionen de manera adecuada.
Cada una tiene su función dentro del negocio. Anabel se dedica a la contabilidad y a las ventas, mientras que Verónica y Carla se mueven en la parte de producción, compra de materiales y frecuentan el taller una vez por semana, pues este queda en las afueras de Ambato. “Como también somos madres, tratamos de enfocarnos por completo en el negocio durante la mañana, mientras nuestros hijos están en el colegio... Siempre dijimos que la familia está primero que la sociedad; por eso, en la tarde, cada una se ocupa de su hogar. Sin embargo, si hay que organizar algo, lo hacemos individualmente y no perdemos el contacto. Como no tenemos una oficina fija, nos reunimos en la casa de alguna de nosotras y, por ejemplo, si hay una reunión y alguien no puede asistir, no nos complicamos, va la que puede. Lo lindo de esta sociedad es que nos ayudamos mutuamente en todo. Tenemos claro que la prioridad es trabajar en conjunto para lograr un beneficio en común sin sacrificar el tiempo familiar. De hecho, nuestros hijos nos hacen la mejor campaña publicitaria que los zocos puedan tener”, menciona, entre risas, Verónica.
Una sociedad fortalecida
Las tres coinciden que no todo ha sido color de rosa. “Si entre hermanos o esposos hay peleas, no se diga entre socias. A lo largo de casi un año juntas como empresarias, hemos tenido que sobrellevar ciertos inconvenientes que se nos han presentando en el camino. Ha habido momentos difíciles, pero los hemos sabido manejar muy bien. Para nosotras es primordial ser amigas antes que socias. La clave del éxito ha sido respetarnos, complementarnos, entendernos, apoyarnos y hablar de frente cuando ha sido necesario. Los aciertos y tropiezos los hemos compartido juntas”, indica Anabel. Un plus de su empresa es que no existe ninguna jefa. “Cada una sabe qué debe hacer y le pone todo el empeño del mundo para que las cosas funcionen. Nos reímos muchísimo con las peripecias y metidas de pata que nos pasan a diario, pero de eso aprendemos y crecemos. Disfrutamos lo que hacemos, por eso la sociedad surge de una manera espectacular”, acota Carla de Fernández. Las chicas zoco concluyen diciendo que el apoyo de sus esposos también ha sido fundamental para salir adelante. “Sin ellos sería imposible alcanzar la acogida lograda. Nuestras parejas nos apoyan incondicionalmente y eso nos fortalece aún más”.
Sabias que...
>> Actualmente, han realizado algunos zapatos para la diseñadora Ile Miranda. La línea de calzado que le ofrecen juega con telas elegantes, como seda y terciopelo.
>> Además de tener una amplia gama de zocos para mujer, también tienen para niños desde la talla 21 y para hombre hasta la talla 42.
>> En la feria del día de la madre, por cada zapato con diseño rosado que se vendió donaron un porcentaje de las ventas a la Fundación Poly Ugarte.
Busca este reportaje en nuestro Facebook www.facebook.com/RevistaHogar y encuentra una fabulosa sorpresa.
Páginas:
1
Sociales
Matrimonio Salvador - Aguirre
Gonzalo Salvador y María José Aguirre contrajeron matrimonio en la Capilla Bethania de La Merced. La recepción tuvo lugar en los jardines de La Corteza.
Leer más